LA ORACIÓN PARA SER UNO CON ÉL
Cuando nuestro Bendito Señor
hace la última oración antes de Su pasión y muerte:
pide al Padre que sus discípulos
-y en ellos también nosotros y todos los que estamos representados en sus discípulos-
pide al Padre que sean ellos uno con Él, así como Yo soy uno Contigo.
Y ¿cómo van a ser sus apóstoles uno con Él?
¿Cómo van a fundirse? ¿Cómo van a ser uno con ese Dios Bendito?
Sino por medio de la ORACIÓN.
Entonces, por medio de la oración pide pues, que Sus apóstoles se fundan con Él,
para que así fundidos con Él sean presentados al Padre.
¡AQUÍ ESTA LA GRAN ENSEÑANZA de ese Bendito Señor!...
Vamos a pedir que cada día ese Bendito Señor nos ayude a orar,
a meditar con mayor profundidad,
para que así vayamos sintiendo cada día la bendición de Su presencia
en cada momento de nuestra vida.
Y que nuestra vida sea un constante himno a Él,
por esa unión vivencial que existirá entre nosotros y Él.

No hay comentarios:
Publicar un comentario